El titular de Agricultura y Agua subrayó que la reserva marina de Cabo de Palos-Islas Hormigas es una “zona modelo” para la investigación y el seguimiento científico, y subrayó que con estos trabajos que comenzaron en 1995 se pretende incidir en la evolución de las especies de peces de interés comercial y los impactos que genera la pesca y el turismo subacuático.

Este proyecto contempla una serie de estudios sobre el estado de las especies piscícolas de la zona, el impacto del buceo contemplativo sobre el ecosistema, la instalación de post-larvas de peces y los efectos de las limitaciones de pesca sobre la flota artesanal, en una superficie de 2.000 hectáreas.

Entre los resultados obtenidos en los años de estudio, destaca la recuperación de especies de peces de interés comercial, como meros, dentones, y corvas, que “ejercen un papel ecológico fundamental”, según dijo Cerdá, así como la recuperación gradual de las poblaciones de gorgonias afectadas, que “se han recuperado prácticamente”, tras el episodio de mortalidad del año 2007.

El espacio natural objeto de estudio abarca una reserva integral en la que está prohibida cualquier tipo de actividad excepto la científica, y una reserva parcial en la que se permite la pesca artesanal con un censo reducido a 12 embarcaciones, pesca deportiva, submarinismo regulado, baño y buceo a pulmón y navegación a velocidad reducida.

Este estudio que la Consejería de Agricultura y Agua realiza de forma conjunta con el departamento de Ecología e Hidrología de la Universidad de Murcia desde 2002, tiene una dotación económica para 2010 de 37.000 euros, cofinanciado por el Fondo Europeo de la Pesca.