El Centro de Recuperación de Fauna Silvestre ‘El Valle’, dependiente de la Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, registró el pasado sábado su ingreso número 1.000. Se trata de un ejemplar juvenil de malvasía cabeciblanca encontrado en una playa del municipio de Águilas, desorientado y con síntomas de deshidratación, que esta mañana ha sido liberado por agentes medioambientales en las lagunas de Las Moreras (Mazarrón), tras ser recuperado.

La malvasía cabeciblanca (Oxyura leucocephala), es un tipo de pato buceador que podemos encontrar en Asia Central, Europa y todo el Mediterráneo, aunque debido a la pérdida y fragmentación de su hábitat, actualmente figura en la categoría de ‘En peligro de extinción’ en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.

El ave fue encontrada de noche, en la playa ‘El sombrerico’, por un grupo de personas que, al verla desorientada y moviéndose con dificultad, la metieron en un cubo con agua y llamaron al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), que a su vez avisó al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre para su recogida.

Tras la revisión veterinaria, el animal presentaba deshidratación, pérdida de peso moderada y desorientación. Se sospecha que el ave pudo emprender su dispersión juvenil al anochecer, que es cuando suelen hacerlo, y bien se desorientara o por la debilidad decidiera hacer una parada en este lugar.

Se le administró un tratamiento consistente en soporte hídrico intravenoso y complemento vitamínico/mineral, y se comprobó que se alimentaba por si misma desde el primer día. Por su delicadeza y elevado estrés se decidió colocarla en el exterior, siendo la evolución favorable.

El animal ha sido liberado esta mañana en las lagunas de Las Moreras, por ser zona de cría de esta especie, y estar declarada como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), territorio Red Natura 2000 y zona RAMSAR (2011).

1.900 ingresos al año

El Centro de Recuperación de Fauna Silvestre ‘El Valle’ recibe una media anual de unos 1.900 ingresos. Casi un 80 por ciento son animales vivos, de los que son devueltos a su hábitat un 40 por ciento. Muchos de ellos no pueden retornar a su vida en libertad debido a las patologías que presentan, que imposibilitan su supervivencia en el medio natural.

Estos animales reportan una valiosa información de los factores que afectan a la supervivencia de nuestras especies autóctonas y sirven de base para la gestión de las mismas.