Son los bosques más característicos de la Península Ibérica. Encontramos varios tipos, atendiendo a la composición florística del sotobosque y a sus etapas de degradación. Su desarrollo se realiza con precipitaciones superiores a los 350-400 mm. Dentro de las zonas estudiadas encontramos: Encinares continentales. Encinares béticos. Encinares de montaña. Encinares fríos de meseta. |