El consejero explicó que "en esta ladera se producen con relativa frecuencia desprendimientos de rocas, algunas de considerable volumen, lo que pone en riesgo la integridad física de los habitantes de las viviendas de esta calle, a la vez que pueden producir serios daños en las mismas, por lo que se lleva a cabo un proyecto de protección contra desprendimientos que consiste, básicamente, en la instalación de 190 metros lineales de barrera de contención de 5 metros de altura, y de 14.400 metros cuadrados de membrana, para asegurar la estabilización de la ladera".

 

La actuación cuenta con un presupuesto de algo más de 181.000 euros y su plazo de ejecución es de dos meses, a partir del inicio de las obras, estimado para final del mes de febrero. A esta intervención se sumará una reparación por desprendimientos en el itinerario ecoturístico del Valle de Ricote, en su tramo Ojós-Ricote, cuyo proyecto ya está redactado y cuyo importe se ha estimado en 30.000 euros.

 

Esta obra se añade a las que ya se vienen realizando, también con el propósito de asegurar las laderas que ponen en riesgo viviendas y vías públicas, en Blanca y Ulea. La primera, con un presupuesto de 614.000 euros, se encuentra ya al 70 por ciento de su ejecución, y ya contó con dos fases anteriores, en 2015 y 2016, por 447.000 euros. La intervención en el término de Ulea, también en marcha, tiene un coste de 265.000 euros.

 

Fuente: www.carm.es